Crónicas

Crónica: Desde Bialet  Córdoba
Mi hermana y yo,
Tomamos el tren que venía de Cosquín
A las 16 hs. 30 min.
El tren venía lleno
Nos tuvimos que sentar en el piso con los demás
El tren venía lleno de personas
La mayoría eran jóvenes, con sus mochilas, sus risas y sus ganjas de divertirse
Niños cansados y acostados, durmiendo, luego de un fin de semana, de juegos en las sierras
Gente mayor, disfrutando como los niños, como nosotras dos...inquietas aventureras, sin ganas de perder ninguna oportunidad de pasarla bien

Retomando el momento
Al sentarnos en el piso del vagón...hablando...hablando...hablando...hablando, el tiempo fue pasando
Subían mas y mas personas en cada estación
Mas nos apretábamos y seguíamos hablando de todo, de nada en especial
Y de repente...en algún punto del camino lento del tren
Mi hermana Ñaku se levanta con la ayuda de un jóven padre de dos pequeñas que estaban dormidas a nuestro lado
Ñaku me mira y dice:
"No doy mas del dolor en la espalda"
Yo...sigo sentada, hasta llegar a una estación, donde todos compran cosas ricas para comer
Harina de trigo
No podemos
No debemos
Ninguna de las dos
Me levanto
No siento las piernas
No siento la pierna derecha
Las piernas...se me doblan o se corren para cualquier lado
Como si estuviera muerta
Llegamos  La Calera
Queríamos parar un colectivo, después de caminar la eternidad (pensé)
No venía ninguno
Las personas, con quienes nos cruzamos, mientras caminábamos, me miraban raro
Al parar en el puente, a que el samáforo se ponga verde para nosotras
Le pregunta a mi hermana:
¿Porqué las personas me miran raro?
"Porque estás caminando raro, te inclinás para adelante...te inclinás para atrás"
Seguimos adelante
Hasta llegar a una estación de servicio, junto a unas ruínas antiguas
A esperar el colectivo
Yo estaba tan mal-herida
Con el cuerpo flotando
Como si la sangre no corriera en mis venas
Desfalleciendo de sed y todas mis  facultades mentales plenas
Tomo la desición
Llamo por teléfono a mi casa
Y como yo esperaba...álguien viene a buscarnos
Álguien nos hizo el sermón de cinco mil palabras
Mientras regresabamos
Pensé:
Cuándo tienes un hijo varón , tienes tu príncipe azul particular...de por vida
¿Este pensamiento sería machista?
No se
Llegamos a casa a las 19 hs. y 30 min.

Planeando hacer otra travesía en un día de semana, con asiento incluído