El tormentoso día no presagia tranquilidad.
Dar de comer a los perros antes de horario
Meter a los perros miedosos en el comedor.
Los gatos entran solos y el gallo abandonado,
es una incógnita, está tuerto y viejo (pobre).
Sacar las plantas a la lluvia, si viene calmo.
Cerrar ventanas por dónde entra agua.
El agua de lluvia tiene un rico gusto a vida,
tiene ganas de filtrarse por donde sea.
El viento es otra cosa, empuja todo y
acumula ese todo en un rincón.
Hace tiempo largo que no llueve,
es bienvenida la fresca y la lluvia.
3 comentarios:
A los días así, los campesinos decimos
"Se vino la fresca"
Me gusta la lluvia copiosa... incluso las tormentas.
Besos.
"El viento que todo empuja"
Canta La Renga.
Saludos,
J.
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