Esencias en mis recuerdos

Un viaje hacia mis sentidos
Un sentido a mis recuerdos
Olores...colores y sabores
Tactos...
Ansias satisfechas
Sensaciones especiales
Rincones que no se olvidan
Paz...
Hoy...solo hay cabida...y...es calma...

Había una vez...una niña...

Ocurrió en una noche de invierno...allá lejano en tiempo y espacio...
En la ruta de tierra...bajo la lluvia que caía suave...sin parar...iba el colectivo...metiéndose cada vez mas en el pantano...
Entre los pasajeros, la mayoría hombres, trabajadores golondrinas.La niña...pocos años...la inocencia se reflejaba en sus grandes ojos...miel...un poco de miedo...no sabía a que...pero lo sentía en el aire...en las miradas masculinas...fijos en su cuerpo de mujer...no sabían que ella, por dentro era una niña...nunca lo sabrían...
Casi a media noche, el colectivo llega a un puesto de gente muy humildes, quienes ofrecen lo poco que tienen a toda esas personas...mate cocido con galleta seca.
La mujer, dueña del tambo...descubre a la niña y la acoge entre sus brazos...la lleva a su habitación...la arropa...
Le dice:
"Duerme mi niña..."
Ella duerme profundamente...una paz...
Afuera...en medio del campo...se oyen bromas, risotadas de esos hombres...que llevan el deseo...el instinto...bajo la piel...
A la mañana siguiente...el día esta radiante...el colectivo parte sin otro contratiempo a su destino...en donde llega...
La niña...sabe ahora...que siempre hay corazones buenos que resguardan la inocencia...y agradecida sonríe a la vida...

Detengo

Me tomo un tiempo para pensar
Divido el tiempo al sentir...
El tiempo transcurre y lo siento en mi cuerpo
Sin embargo...la mente se niega a aceptar...
Que el espíritu nuevo esta...y palpita feliz...
Desconciertos...
Amo mi caparazón...no quiero deshacerme de él
Es posible que puedan convivir en armonía...
Hace tanto que estamos juntos...el cuerpo y yo...
Quizás alguno piense...que quiera tener uno mas...
Sano...bello...radiante de juventud...
Pero no...
Están equivocados...nunca podría...
Aún lo amo...
Ya somos uno.
Quien sabe donde comienza...donde termina...
La estupidez o la inteligencia
Nunca supe de nadie
Que se haya curado...Hojas de otoño...

Y...

Y...tengo cosas que decir...decir que no puedo adaptarme a los chicos nuevos en el aula...decir que el secundario de adultos es eso...secundario de adultos...decir que algunos de los profesores solo se abocan a los jóvenes...decir que eso es injusto...
Seguir diciendo que me da pena el profesor de historia...por la forma en lo ridiculizan...con crueldad sin sentido...es un hombre sabio y tiene mucho que enseñar...mucho...si tan solo lo dejaran...
Decir que a veces es tanto el ruido...que no escucho las explicaciones de los profesores...y yo soy una persona que necesita escuchar...atender...leer...practicar...para poder asimilar la clase...
Decir...repetir...que los adultos, hace mas de veinte años que dejamos de usar el cerebro para estudiar...envueltos en la problemática de la vida familiar...del trabajo...y demás...que no tenemos esa capacidad de adquirir el conocimiento como los jóvenes...que son esponja fresca...No digo que nunca podremos...con la practica todo se logra...es que yo...apenas si puedo escribir con mas velocidad...
Pido un poco mas de tiempo...atención...y paciencia...de parte de los profesores...y los alumnos jóvenes...

Quizás yo...tendría que tener un poco mas de tolerancia...

Fiel imágen....

Y...llegó el día...y nació Francisco...la cosita mas hermosa...el ser mas perfecto...para mi corazón...
Sin olvidar ni por un momento a mi Agostina...a quien he abrazado y besado en todo momento....para que sepa que a pesar de la venida de hermanito...la amo mas que nunca...Le hablé de lo inmenso del corazón humano...donde caben todos los amores...Así como el corazón de ella...donde está mamá...papá...abuelos...tios...primos...tambien hay lugar para un hermanito. Ella lo entendió...pero se pregunta...¿Por qué...nadie me consultó...? ¿Por qué fui la última en saberlo...?
Me olvidé de contarles que...el Pancho en cuestión es...igual a mi...aunque su papá crea que se parece a él...todos se dan cuenta que lleva...la casta de India y Pantera...
¡Soy abuela por segunda vez!
Los invito con un puro...un puro amor....de abuela...

YO...

Han comenzado las clases

En el salón...estamos los de siempre y los nuevos, Los nuevos alumnos, bellos y jóvenes...algunas muy jóvenes. He vuelto con mis pares en esta lucha por estudiar a destiempo.

Los recreos son otra cosa...puedo fumar...escuchar música o simplemente conversar y reír.

Los profesores tan adorables como el año pasado, al de matemáticas, lo escuche reír con todas las ganas por primera vez, la nueva de lengua aun no vino, es una incógnita. El coordinador del colegio es una persona fuera de serie, creo que personas así ya no existen...y es tan...especial...

Me siento feliz...Trabajo...estudio...y atiendo mi casa...aunque me faltaría un...sueño secreto...

ERES TU...

Te sigo con la mirada
Te espero con el corazón
Te amo con el alma
Es el amor...
En una canción
Es poema
ERES TU...

En mi barrio ha sucedido algo muy...pero muy feo...
Tenia por vecinos a una pareja gay...los dos trabajadores,buenas personas que vivían su vida.
Pero a algunas personas les molestaba tenerlos de vecinos y no cejaron hasta echarlos del barrio.
Me pregunto que va a pasar con Pablo que ronda los cincuenta años y vive en pareja con una mujer de veinte años y la señora rubia y misteriosa que también tiene una pareja de veintitantos...
Realmente no entiendo que problema hay, si a fin de cuenta no es su vida...
Digo yo...porque no se ocupan de cosas que realmente haga bien a la comunidad en que vivimos
Podrían cortar el pasto de la plaza que esta bastante largo...componer los bancos que sus hijos han roto...Luchar contra los mosquitos o buscarles hogar a los animales abandonados del barrio.
Vive y deja vivir a los demás...en paz...
Tengamos un poco de amor y respeto hacia el prójimo...por favor...

Seamos todos caballos y entonces habrá paz

Seamos todos caballos y habrá libertad

Porque los caballos tienen amaneceres blancos

Porque los caballos son carceleros del campo

Y...el hombre de sus hermanos...

Leon Gieco