Tan solo por amor

Una mosca chocó contra mi cabeza y se quedó patitiesa porque fue imposible...lo sintió muy duro a pesar del delicioso aroma que atraía su atención. La miré casi culpable...me sonrió y se fue volando.
Yo...le pregunté al elefante si el mundo en que vivimos tiene para rato
-No se...yo viviré con entusiasmo lo que me toque-me contestó

Me dirigí hacia un lado de la selva para pensar en lo que me tenía pensativa y preocupada...sentí una tibia caricia...calentita y reconfortante
-Debes saber que la soledad...a veces...no es buena consejera. Todo puede verse distorsionado por su misma influencia. Ven conmigo y juguemos un poco.-me pidió el gatito de la esquina.

Al rato...mi cerebro seguía cavilando sobre lo mismo...un poco cansado ya...porque no comprendía nada de lo que meditaba...eso de meditar agota el cuerpo y revuelve el estómago.
Al pasar junto al árbol de los naranjos rojos...presiento que alguien me mira y lo que es peor me ve...
-No corras y no te aflijas...deja que la vida fluya a través de ti...es lo mejor...haz lo que yo que camino por ella lenta y con suavidad-me susurró la tortuga Tugui.

Sigo...caminando...meditabunda...
-¿Y si yo le pongo el sentido a la alegría de vivir en lo que resta de tiempo inconcluso?
-¿Cuál podría ser la respuesta?
-¿Quién?
-¿Cómo?
Asustada oigo una voz suave y ronca al mismo tiempo...miro a mis lado y nadie...miro para abajo y nada...miro hacia arriba y siiii...
-Busca la respuesta en el amor y le encontrarás el sentido...tan solo por amor...la vida tiene un porqué.-con dulzura me afirmó el koala feliz.

Yo llegué a la conclusión...es mejor vivir con el sentido que nos da la vida...el amor
No preocuparse en todos los cuantos...los comos...los quienes y los porqués